TIC-TAC
No se veía nada: estaba todo oscuro. La pantalla del ordenador había dejado de brillar y solo se veían un par de letras en el fondo de aquella pequeña pero gran ventana al conocimiento: TIC-TAC, TIC-TAC… El tiempo pasaba y el Dios Tecnología no cesaba en su intenso intento de hacerse con el control del...