Suspiros…
Las luces rojas giraban dentro de una cajita plástica transparente, abriendo paso por el pesado tránsito de las calles, era preciso llegar a tiempo, si no todo sería en vano. Los brazos disparejos del reloj de pulsera caminaban tan deprisa, pero a la vez tan lento, marcando las ocho de la noche. La hora en...