EL CURRICULUM
Suena el timbre de la puerta de mi despacho una mañana cualquiera. Un mismo timbre puede tener distintos sonidos según el dedo que lo pulse. Reconozco el sonido receloso del joven que llega para dejar su currículum, en lo que supone, otra estación de parada más en su vía crucis particular. En su cara adivino...