Desde el Andén
DESDE EL ANDEN Me pasaba el tiempo sentado en el banco próximo a la estafeta de la estación, contemplando desde el andén maletas repletas de sueños, estrofas sueltas de una triste despedida y olvidados en los vagones, besos de enamorados. Cada tren que llegaba y se iba, era otro que yo me perdería, una aventura...