La cita
«Porque soy un hombre rudo y tierno. Pero me pondré dócil, te mando uno de nariz ¡muah! Sé puntual preciosa». En su último encuentro los rizos le llegaban a los hombros. Quizá debió ser más paciente ¿y complaciente? (Mijita no regales «el tesorito» así no más, le decía su madre), y no escandalizar por descubrirle,...