Ruptura
El maestro partió con el canto del gallo una fría madrugada por la puerta de atrás y sin decir adiós. Se alejó en silencio con un escueto equipaje por las calles aún vacías del pueblo dormido y no se detuvo hasta llegar a la estación del ferrocarril. Allí esperó paciente, encogido en su viejo abrigo,...