Un Valle
Y así todo bien, pero una mañana de entre la roca empezaron a salir huesos, una pelvis gigante, unos dedos largos como fémures, unos dientes afilados que parecían lámparas apagadas, huecos para ojos gigantes. Siguieron picando y surgieron las vértebras, las costillas como una casa a medio construir, y al final, parte de un cráneo...