Perfil público

Mi nombre es Silvestre Pacheco León, tengo 66 años y vivo en el puerto de Zihuatanejo en el Pacífico mexicano.
Nací en Quechultenango, un pueblo rural en la región Centro del estado de Guerrero.
Mi pueblo tiene una cosmogonía indígena y sostengo que mi lugar de origen fue uno de los últimos reductos de la tribu de los Yopes, indígenas tlapanecas que nunca se rindieron a ningún conquistador.
Hay un ritual prehispánico mezclado con la religión católica con el que cada año los Yopes reaparecen con una danza completamente pagana que se desarrolla dentro del templo. De ese tema trata un libro que he terminado de escribir y aún no he publicado.
Muy cerca de donde nací se puede presenciar el nacimiento del río Azul, con un caudal de agua fría que emerge en borbollón, cristalina y transparente.
Ahí viví mi vida campesina hasta los 16 años, edad en la que emigré a la ciudad de México para trabajar y estudiar.
Durante los diez años de mi vida en la CDMX trabajé en fábricas y oficinas, e hice la preparatoria y la carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública en la UNAM.
Desde joven me interesé por la escritura y también por la militancia partidista de izquierda en la que traté de escribir textos de divulgación en un lenguaje claro y atractivo para los lectores.
En 1979 me fui vivir a la costa donde colaboré para programas de radio y periódicos regionales.
Fui director fundador de la revista Costa Libre, especializada en temas de ecología, cultura y democracia.
He ganado concursos de periodismo y publicado cuatro libros de temas rurales.
Actualmente escribo una columna semanal para el periódico El Sur que tiene cobertura estatal.
Soy un lector de larga travesía y me gustan los escritores clásicos, cuento y novela.
He leído y releído a Don Quijote de la Mancha, Los Miserables de Victor Hugo. También me gustan las biografías y autobiografías como la de Trotski, y la de García Márquez escrita por Gerald Martin, también Amós Oz, José Saramago.
Me aficioné a la lectura de poesía con Octavio Paz y me emociona la amorosa de Pablo Neruda, pero solo a Juan Sabines soy capaz de escucharlo en su voz.
Practico yoga y procuro los paseos a la playa. Me gusta nadar en el mar y estar en contacto con la naturaleza.
Ahora tengo tiempo para ver cine. Prefiero los documentales pero también las películas de aventuras.
Escucho música clásica, preferentemente piano, y latinoamericana, pero también la de temas campiranos.