Animal de compañía
Papá, papá, quiero una mascota. Llevaba repitiendo ese mantra mucho, mucho tiempo. Era una frase que retumbaba en mi cabeza constantemente. Todos los días al desayunar, cuando volvía del trabajo y durante la cena. En cierto modo la comprendía, ella llegaba a casa dos horas antes que yo y se aburría estando sola. Al fin...