Teoría de la imitación
Priscila había explotado, tiró un bote de tomate contra el suelo, los muebles, ella y yo nos teñimos de rojo. Quería mi aprobación y yo no sé la di. Dentro de poco empezaría a gritar y a llorar. No la gustaba hacerlo, pero tampoco lo podía evitar. Estas situaciones eran el fruto de un terremoto...