OJO AVIZOR
Oteé la lejanía por enésima vez. Habíamos recibido un escueto mensaje, finalmente la figura de una patera se había revelado en el horizonte; avanzaba lentamente hacia la costa. Un viento inesperado se adueñó de la playa, el mar se encabritó; el oleaje se empinaba, majestuoso, golpeando sin piedad la costa. Vi como el navío se...