No me apagues
La tenía puesto como salva pantallas, era una carita de sonrisa amarilla que hacia un guiño cada quince segundos. Y que se retiraba calladamente cuando movía el ratón. Dieciséis horas diarias conectada esperando correos y comunicaciones. Sola. Muy sola. ¿Estas sola? Contacta con nosotros, para personas cultas, tu pareja ideal. Primera selección gratis. Me apunté,...