El color de los murciélagos
Fue después de media noche cuando, por fin, lo entendí. Antes habían transcurrido, al menos, cuatro horas de debate incontrolado de mi mente consigo misma… Parecerá fácil, pero, durante esas cuatro horas, también me debatí en la idea de que mi agonía no acabaría nunca. ¡Si pudiera ahora expresarlo! ¡Si supiera como explicar aquello…! Todo...