El lugar de Manuel
Leandro tenía veintiún años. Estaba en segundo año de Química. Harto de ganar centavos con clases a alumnos, le propuso a su amigo Lito, poner un bar. Siempre le había gustado la idea. Algo no muy ostentoso. Un bar con comedor para almuerzos. Que pudieran cerrarlo luego de la merienda, para adaptarlo a los horarios...