La oficina de objetos perdidos
En la oficina de objetos perdidos había abundantes cajas, siendo mis favoritas tres: la de los sueños (que últimamente estaba medio vacía), la de las lágrimas (que de vez en cuando hacía aguas) y la de los besos. Esa última se encontraba colocada sobre una pequeña estantería la mañana de julio en la que la...