Hablemos del amor una vez mas
Clarisa ya había cumplido los 50, trabajaba en la revista Fotogramas desde siempre. Se podría decir que era una mujer normal, ni muy alta, ni muy baja, ni delgada ni gorda, una mujer normal. Paseaba por la redacción su perfume low cost que ya se había mimetizado con el olor a oficina. Vestía una chaqueta...