Rojo pasión
Tú. En aquel vestido rojo. Rojo pasión, como la que despertabas en todas las personas con las que te cruzabas. Eras magnética. Hipnotizabas. Y rojo como tu pelo. Ay, ese mechón que siempre te recogías. Elegancia. Una distinción tan tuya, solo propia de mujeres inalcanzables, inconquistables, imposibles. Y yo. Ridículo. A tu lado un estúpido ingenuo....