Cuarto movimiento, largo
Ema mira el piano desde en una vieja Bergere floreada que huele a orines y a gato. Desde la cola, unas fotografías la interrogan, envueltas en marcos de hueso o de plata. A veces le parece conocerlos, le parece recordar, le sugieren alguna historia, alguna relación entre ellos, o tal vez con ella. ¿Es ella...