Vuelo
Cuando sopló el viento, las hojas y los insectos buscaron refugio al lado de un muro semiderruido; allí, desde el andén del cementerio, podían ver pasar el tiempo y no preocuparse; tenían lo que necesitaban, seguridad. Quienes más felices estaban esa tarde, eran los Dientes de León; anclados entre las fisuras del andén se mecían...