VOCES
– ¡Hasta el lunes!–su voz resonó, pero no hubo contestación; todos levantaron la cabeza para verificar que se trataba de Mauro y volvieron a su trabajo–. ‘Son unos fracasados’ se dijo y salió de la oficina dando un portazo. Ya en el ascensor ajustó su corbata y atusó su pelo engominado mientras exclamaba: ‘¡Vas a...