Mi primera lección
Nuestro profesor del taller de escritura era alegre y divertido. Todos participábamos analizando los textos en clase. El buen humor se contagiaba. Un día llegó a clase y propuso: —A partir de hoy, cada uno de vosotros será profesor durante un día. El pánico invadió el aula, provocando un alboroto. —¿Cómo? No seremos capaces—exclamó uno....