Parejas danzantes

Parejas danzantes

Pamela Ulloa

14/07/2020

¿Por qué nos sentimos atraídos hacia relaciones infelices con parejas imposibles e incapaces de amarnos?
¿Cómo encontramos a las personas perfectamente inadecuadas?

Si alguna vez has estado en una o varias relaciones emocionalmente dependientes, probablemente te hayas preguntado cómo es que nos encontramos con las parejas que encajan perfectamente con nuestros patrones perjudiciales de relación. Ahora una verdad te será revelada: no existen casualidades en las relaciones.

Gran parte de los motivos que nos convierten en personas incapaces de tener una relación sana provienen de las relaciones que mantuvimos en nuestro círculo familiar durante la infancia, es decir, cuando las experiencias de nuestra niñez son especialmente dolorosas nos vemos obligados inconscientemente a recrear situaciones similares a lo largo de nuestra vida con la intención de obtener un control sobre ellas y finalmente comprenderlas. Cuando somos pequeños, nuestros progenitores funcionan como ejemplos de lo que es ser hombre o mujer, por esta razón durante nuestras relaciones de pareja algunas veces nos descubrimos realizando las mismas acciones que nuestro progenitor realizaba y nosotros nos prometimos jamás hacer.

Muchos factores que desconocemos son funcionarios activos en la toma de decisiones al momento de elegir una pareja, probablemente hayas escuchado la frase que asegura que todos nos casamos con alguien que es igual a la madre o el padre con quien peleábamos más durante nuestro crecimiento y de hecho, no todo en esta frase es totalmente cierto.

Elegimos una pareja similar a nuestros padres para sentir y encontrar los mismos desafíos que tuvimos al crecer, podemos recrear la atmósfera de niñez que conocemos perfectamente en la cual nos sentimos cómodos y especialmente seguros.

Cuando encontramos una pareja que con su manera de ser y tratarnos nos recuerda la sensación que sentimos en la niñez, nos permite experimentar sentimientos y emociones conocidas que nos dan la sensación de encontrarnos en el lugar correcto. Esta sensación de misteriosa familiaridad es lo que sucede cuando dos personas forman una pareja cuyos patrones de conducta encajan a la perfección formando una danza perfecta.

El peligro proviene de la comodidad, nos encontramos suspendidos en un baile en el que en cada movimiento surge una problemática y cada movimiento opuesto responde con una maniobra conocida, podemos pasar enredados en este baile durante años sin lograr detectar los patrones que nos encadenan a esta danza infinita.

Una vez que hemos conocido parte de los patrones que nos involucran en una danza onírica de parejas perfectamente adecuadas pero totalmente inadecuadas para nosotros, podemos proceder a conocer ¿cómo es nuestra experiencia consciente durante la relación?

Cómo funciona el misterioso proceso en el que dos sujetos encuentran y descubren que son perfectos el uno para el otro, por ejemplo, cómo es que una mujer que necesita tener el control, se encuentra con un hombre que es completamente rebelde y odia que le digan qué hacer.

Durante las relaciones, cada personaje en la pareja cumple un rol en específico, los cuales se dividen en: víctima y victimario. Independientemente de la situación por la que están viviendo, ambos seres danzantes se enredan a través de culpas y manipulaciones en un baile incansable hacia un serio vacío emocional. Ninguno de los dos es capaz de asumir la responsabilidad de sus propias decisiones y a través de diversas acciones se mantienen enredados en una dependencia emocional que les impide finalizar la pieza.

Ahora que intentamos ver el panorama desde una perspectiva externa a nosotros, nos podemos descubrir de pronto danzando a través de los meses, incluso años con parejas inadecuadas para nosotros, creemos que somos incapaces de encontrar una persona que rompa con ese patrón silencioso y destructivo. Construir una relación sentimental equilibrada y sana requiere de un alto porcentaje de amor propio, seguido de la capacidad de aceptarse como ser individual, independiente, el único responsable de su propio cuerpo, alma y del cuidado y respeto que este se merece. Cuando haces un espacio para ti dentro de tu ser, dejas que el amor llegue, comienzas a escucharte, a sentirte en silencio, respetas tu soledad, abrazas tus partes oscuras y te das cuenta de lo invaluable que es el tiempo, lo valioso que es gastarlo en algo o alguien que valgan cada segundo.

En ocasiones tomamos elecciones influidas por cuestiones inconscientes, pero eso no nos libra de la responsabilidad de ellas, de nuestro futuro y vida en sí. Negar la capacidad de elección, impide la recuperación. La habilidad de percibir y entender las raíces de las decisiones más importantes de nuestra vida nos libera, el conocimiento es libertad y la libertad nos brinda la oportunidad de elegir finalizar la danza.

Cuestiona lo que consideres inamovible, cuestiona tu relación con la vida, contigo y con el resto de personas con quienes compartas sentimientos o emociones, hazte preguntas, hoy sé uno y mañana otro, evoluciona y no permitas que nadie apague tu llama.

*Imágenes por artista @pollynor

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