Cumplir 56 es raro. No suena redondo como los 50. No tiene la épica de los 40. No impresiona como los 60. 56 es como ese piso del edificio al que casi nadie va, pero donde, si te pierdes, encuentras una azotea con una vista brutal. Ayer me cantaron “Happy Birthday”. Sí, muy a mi...
Seguir leyendo
16
0