Lo que no debería haberme creído
Quizá tengas razón. Al fin y al cabo me lo he buscado yo sola, eso fue lo que me dijiste, ¿verdad? Sí, esas fueron tus palabras exactas cuando me viniste a buscar a la comisaría. Claro, seguro que para ti fue un esfuerzo enorme dejar tu cerveza en la mesa y coger el teléfono, escuchar...