Aventura en dos parrafos
Lástima que no haya billetes para maniquíes. Pues podría llevar una, ya que ahora viajo solo y tengo espacio en mi valija. Tal vez mirar el paisaje con otros ojos, y tomar otra mano, aunque fría, sentirla compañera y por fin después de mucho tiempo no tener regaños devuelta.