EL FRENTE DEL EBRO
El veintidós ya es historia, decía mi abuelo cabizbajo a la luz de la lumbre, con gesto arrugado causado por los surcos de la vida. Con la mirada clavada en la huella del recuerdo, relataba el soplar del cierzo, el ventisquear de la nieve, y el silbar de algún disparo aislado entre penurias, vísceras y...