Un hospedaje hecho con adoquines
Recuerdo aquella vez en que las calles de Barcelona me pertenecieron. Me parece increíble que sea aún el año que transcurre. Las mejores lecciones se aprenden cuando no tienes nada más que perder. Llegué a la ciudad con sueños de grandeza y éxitos, y los obtuve, por algún tiempo. Pero ningún país estaba preparado para lo...