ACASO EL DESTINO
GÉNOVA, 1930 Una nueva vida Stella había empezado a sentir contracciones. Bueno, parece que esta criatura llegará un poco antes de lo planeado, se dijo, y sacudió a su marido para alertarlo. ¡Ay! Marcello, despierta, ya comenzaron los dolores, gimió para hacerlo saltar de la cama. No le contó que había aparecido en sus sueños...