Desde la terraza.
De mis primeros años de vida, recuerdo el Manzanares desde la terraza de mi casa, apoyada de puntillas con gran esfuerzo sobre la contundente balaustrada de hormigón que tenían aquellos edificios-dormitorio de principios de los setenta con reminiscencias de la Europa comunista. Me podía quedar horas viendo pasar coches por la M30, que entonces era...