IV Concurso de Historias de la calle Fundación Escritura(s) y Talleres de escritura creativa Fuentetaja

Convocatoria cerrada

43participaciones

IV Concurso de Historias de la calle

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  • Admisión de originales: del 7 de diciembre al 11 de marzo

Periodo de votaciones: del 12 de marzo al 11 de abril

Fallo del Jurado: el 30 de abril de 2019

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borrador 

La Estacion Munich 20 hs Nunca te quedes a las 20 hs en la estacion Milbert, susurro con descuido la Sra. Munich de la calle 23. Solia mirarme con sus atuendos conservados de tiendas antiguas, luciendo su palido rostro y sonrisas fingidas… Cada vez que me encontraba encendiendo la vida de mi jardin, ella se...

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33

95

¡MI CALLE ES LA MEJOR! 

Elena Gómez, Patricia López y Carlota Sánchez eran tres amigas de seis, siete, y ocho años, que vivían en las calles Vázquez de Mella, Isabel la Católica y Menendez Pidal de Zaragoza, en España. Ellas pertenecían a familias numerosas compuestas por ocho, nueve y diez miembros respectivamente. Elena, Patricia y Carlota, solían jugar todos los...

Tu puntuación:

48

198

No más atol 

Cómo pudo tragarse la tierra aquella inmensidad fue un misterio que nadie comprendió. Todo comenzó el día siguiente a Pentecostés. Como es habitual por estas latitudes la tormenta se desató en minutos. Al cabo de una hora había caído tanta agua que las avenidas se convirtieron en arroyos por los que bajaban árboles y enseres...

Tu puntuación:

100

401

EL CUIDACOCHES 

Enciano, el cuidacoches, me contó esta historia hace pocos días. No puedo estar seguro de que sea verdadera, pero lo cierto es que no lo he vuelto a ver. No sé como se llama. En el barrio le dicen “Enciano” porque es viejo y no tiene dientes. Le decían “el encía”, pero con el tiempo...

Tu puntuación:

29

95

El Antiguo Patio Del Mal 

¡Pare! ¡Espere un momento, por favor! Este aspecto mío asustaría a cualquiera, lo sé, mas le ruego que no tema. Mis desaliñados cabellos, la descuidada barba, la capa negra y la sotana que un día debió ser blanca, no ayudan mucho a la hora de hacer amistades. Aún así, le ruego se quede un momentito...

Tu puntuación:

63

196

El Gordito Isidoro 

Yván Vera

05/02/2019

La tarde estaba dando paso a la oscuridad de la noche, y con ella los postes empiezan a iluminar las calles, donde en algún tiempo fueron testigos de toda una vida llena de recuerdos, de una época en donde las preocupaciones reales, eran impermeables con la vida adolescente. Juan Plasencia, sentado en el bar, observaba...

Tu puntuación:

87

337

tiempos de acera 

Amanecer, despertar del alma, la mente se abre los ojos se cierran La vida se acaba los hombres se ciegan Y se sigue buscando el significado latente de la vida perenne Por las calle paseo como un paciente Una flor silvestre del afluente mar de dudas presente Buscando respuestas entre las aceras que no son...

Tu puntuación:

40

115

El boleto 

¿Sí? ¡Dichosos los oídos Fiti! ¿Quién es? Berni, coño. Ah… Berni… ¿qué pasa? ¿Cómo que qué pasa? Hace dos semanas que no se te ve el pelo ni coges el teléfono. Y no me has dicho nada del boleto. Ya, he estado un poco liado. ¿Liado? Creí que habías muerto. Ya bueno, he tenido mucho...

Tu puntuación:

46

95

Aquí nunca pasa nada 

Es lo que dice Montiel mientras se asoma a la ventana y contempla el solitario barrio residencial donde vive. Enfrente, en el número ocho, hay una familia rusa. La mujer es una alta directiva a la que a diario recoge un cochazo negro blindado, después de que unos tipos atléticos con gafas oscuras y un...

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194

267

La esquina de casa 

Cuando era chica y nos mudamos al barrio, ahí había un baldío demarcado por chapas de Zinc. Allí vivía un hombre delgado, alto, con ojos esquivos y la cara marcada por el tiempo. Siempre con un sombrero gris sucio. El hombre dormía en una pequeña construcción hecha también con chapas de Zinc, sin agua corriente...

Tu puntuación:

79

163

El paseo 

En mi paseo habitual hacia el centro donde se me ha concedido un exquisito trabajo a tiempo parcial, no pude evitar ver la cosa más asombrosa: una señora con su perrito. El lector se preguntará, y con razón, qué tiene eso de extraordinario. Pues bien, trataré de explicar lo que vi, nada más que lo...

Tu puntuación:

51

183

El moho de las naranjas 

Mientras escribo, puedo intuir a mi abuela mirando a través de la ventana, atestiguando obsesivamente un ir y venir de personas más frío y aséptico que el de hace años. Ella conoció una calle bien distinta a la que a mí me tocó vivir. Siempre ha hablado de un gran camino de tierra por el...

Tu puntuación:

71

230