Mi lugar.
La escuela quedaba muy lejos según me habían dicho. El colectivo se zarandeaba intentando inútilmente esquivar las piedras del camino mientras acortaba las distancias hacia aquella mancha blanca en el horizonte. El paisaje era árido y olía a soledad de siglos. Al cabo de un rato que se me hizo eterno por la ansiedad, llegué...