Padres ejemplares.
A pesar de mi juventud tomé aquella trascendental decisión con naturalidad, sin dudar y sin consultar con nadie. Acepté aquel trabajo tras el servicio militar y durante los 38 años que han transcurrido desde entonces no he parado de progresar. Todo empezó un par de años antes cuando, al acabar el bachiller, opté por incorporarme...