Josefina
Aquella sombra silenciosa, ataviada de cubo y fregona, era ánima errante entre enfermeras de blanco guante, médicos, celadores y ambulancieros. Todas consideradas personas, unas más y otras menos. Cada día, de rodillas, frente al cepillo, el agua y el jabón; postrada ante los eslabones de una cadena de hipocresía, servidumbre y genuflexión. A unos les...