PASEOS DOMINICALES
Mi espíritu se deleita del goce de mis oídos por la melodía que estoy oyendo. Mi mente se transporta y la asocia a mi niñez. Del baúl de los recuerdos atesorados en mi memoria, asoma la niña de diez años que disfrutó cada momento vivido en los paseos dominicales de la familia. Al verla, me...