Ciberjuventud democrática
—Mañana es el día. —No hay que precipitarse, Merit, no olvides que nos jugamos mucho. —¿Me vas a decir a mí lo mucho que nos jugamos, Zaid? ¿A mí? —Sí, precisamente a ti, compañera. No podemos dejarnos llevar por las emociones e instintos; no estamos para improvisar. Bien lo sabes. —Reservad vuestras energías, os harán...