Desencuentro
Pero qué ha pasado, ay, mi amada flor de loto, que ni te encuentro en Bali ni nada es aquí como tú me contabas. Para colmo, al bajar del avión me robaron cuanto llevaba encima, incluido el teléfono móvil con su agenda de contactos, y por el momento esta postal que te envío, sin saber...