AROMAS
Mis ojos de niña me llevan hasta tu morada. Hoy no te tengo, pero los aromas de tu piel canela me vienen, me embriagan, también es a menta, esa que tú sembrabas en tu huerto pequeño, con rojas frutillas de sabores ácidos, prontas a rociar con azúcar madre. Recuerdo las tardes, vuelvo de la escuela, llego y...