Sabor a recuerdos
Muchas veces, llegada la hora de colación, mis compañeros y yo salíamos en busca de un lugar que nos alimentara bien; rico, pero livianamente para que en la jornada de la tarde nos sorprendiera lo menos posible este sopor inmanejable que naturalmente, nos asalta después del almuerzo. No podíamos dar con un lugar al que...