El hombre que no podía morir
El cuento que les narraré me lo confirió mi abuelo tras un almuerzo familiar, cuando le presenté una novia que conocí en aquellos años de irresponsable juventud. Recuerdo que él se me acercó después de tomar un café y me dijo: —Cuidado como tratas a esa jovencita, no vaya a ser que te pase lo...