turno de oficio
Me dan terror los hospitales; también los médicos y las enfermeras, los escáneres, las ecografías, los tacs, las extracciones de sangre y hasta las radiografías. Ni qué decir de los dentistas y los cirujanos. Casi he superado el miedo a las inyecciones pero no puedo con los supositorios y menos mal que ya no están...