Mi hermosa rutina
Al parecer, todos los días son iguales: me despierta la alarma, pido cinco minutos más, me baño, me arreglo, desayuno y me dirijo al trabajo; aquel lugar que también parece el mismo de siempre, abro la puerta, paso, saludo, dejo mis cosas y llega el momento de iniciar un día más. Sin embargo, ningún día...