club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
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IV Concurso de Historias del trabajo Admisión de originales: del 12 de marzo al 10 de junio
Periodo de votaciones: del 11 de junio al 8 de julio
Fallo del Jurado: el 31 de julio
Despertar con el frío, con el frío en las baldosas.( A Giuseppe no le gusta dejar por la noche el fuego encendido porque un voluntario hace unos años estuvo a punto de incendiar la casa). Despertar con esos bidones metálicos con candados al lado de mi cama. (Cualquiera pensaría que almacena la leche en ellos,...
A quien madruga Dios le ayuda. Odio este refrán. ¿Ayuda? ¿A qué? A trabajar, porque para otra cosa… poco. Quien se haya criado en un pueblo sabe que los veranos pueden ser idílicos o una tortura. Cuando terminas el instituto piensas que las vacaciones van a ser diversión, ocio y descanso. Que te levantarás tarde,...
Llegando al trabajo dejamos parte de nosotros en casa. Se queda la debilidad, el llanto y los problemas personales abrigados bajo nuestras sabanas, surgen las sonrisas, el porte y el otro "Yo" profesional.
tenía un poco más de treinta años y acababa de volver del exilio autoimpuesto cuando me reencontré con el viejo * me estaba costando conseguir un trabajo oportuno y mi viejo necesitaba ayuda porque el trabajo se le hacía más duro con cada cosecha que recogía * no teníamos muchas alternativas aunque nos desconcertara tenernos...
Su embarcación tan modesta y rústica, una balsa de madera, lo aguardaba casi todas las noches en una casilla ubicada en el puerto.
El señor Maroni era uno de los principales clientes de la empresa en la que trabajábamos por aquel entonces, y por lo tanto teníamos que soportarlo y atenderlo con la mayor amabilidad posible aunque se tratase de un sujeto insufrible. Los viernes eran días especiales en nuestra oficina, a las cinco de la tarde se...
Un déjà vu!!! Hoy cuando llegué al hospital, el ambiente del 1º coffe de la mañana no estaba muy allá en el office de la Dirección Gerencia, y no por ser jueves y notar el cansancio de la semana, sino por el pollo montado en la puerta del hospital por los 4 devotos que quedan...
Siempre me pregunté si mi lugar de trabajo es mi refugio o mi cárcel. A veces lo veo como el lugar donde puedo ser yo misma, refugiándome en esos bibliotatos polvorientos o esas pilas de papeles conteniendo números y más números. Otras veces esas mismas cosas me hacen sentir atrapada en esas paredes sin escapatoria...
En sueños de libertad intento plasmar cómo el trabajo me abrió los ojos y me empujó a seguir mi propio camino. Cómo me enseñó a no conformarme, y lo mejor de todo, a valorar las amistades que se ganan en el ámbito laboral. Es fácil culpar al trabajo por los sueños no concretados, con la excusa de "no tengo otra opción", pero creo que todos sabemos que es una mentira que nos decimos a nosotros mismos por miedo a comenzar de nuevo. Ojalá alguien se sienta identificado. Si es así, me encantaría escuchar sus experiencias.
Desde que empecé a trabajar en el área de hospitalización con ilusión y ganas por ayudar a los demás, para mi es un trabajo de relación de ayuda y de contribución para nuestra sociedad. Estoy dedicada a todo tipo de personas pero especialmente aquellas personas mayores frágiles y vulnerables que necesitan comprensión y cariño. Pero...
Un glaucoma me dejo sin visión a los 21 años, por suerte ya tenía idea de lo que son los colores, las diferentes texturas y todo lo que, si nunca pudiste ver, no lo puedes imaginar. Es muy difícil acomodar tu cabeza primero y tus costumbres, a un estado así, tan definidamente opuesto a tu...
El despertador sonó a las siete de la tarde. Nicolás, ya estaba listo para trabajar. Su esposa, preparaba el “desayuno”. — Ya me voy mi amor. –Ella le deseó suerte. Salió a la banqueta, y esperó fumando. — ¡Hola Nico! –Era su empleado, que llegaba. — ¿Cómo te fue? — Muy bien, ¡llegó un crucero...
