La travesia del viajero en el tiempo.

CAPITULO UNO: NUESTRO ENCUENTRO EN EL PASADO.

¡Hey!, Lamento llegar así, sé que dirás que no me conoces, pero yo a ti sí. Soy Evan Carruzo y tú eres Kevin Luna, tengo el tiempo contabilizado así que necesito que me ayudes– Expresa Evan con voz agitada y apoyándose firmemente sobre la mesa en que estaba Kevin, mientras este lo miraba de forma muy sorpresiva.

-… Lo siento, no sé quién eres, te equivocas de persona, yo estoy esperando a…

– Tu novia. Anna, lo sé, y te dijo que está doblando en la esquina y debería de estar cruzando la puerta del restaurante en un minuto, pero no lo hará porque ya ella está en otro lado, así que te enviara un mensaje de texto que te llegará justo ahora “clink” (sonido de notificación del teléfono) el mensaje dice que lo lamenta mucho, pero se le presentó un inconveniente. Parece que “por error” – Gesticula Evan con sus dedos- llegó a un restaurante diferente al que acordaron, que lo lamenta, pero se le agoto tiempo y le surgió algo importante, espera que se vean después… y que te quiere mucho y luego te envía un emoji muy amoroso.

-Cómo sabes todo esto? – pregunta Kevin sin dejar de mirar su teléfono – ¿Eres amigo de Ana? … ¿Acaso te conozco?

-Aún no, pero pasará – interioriza Evan entre dientes – pero sé que esta vez sí… esto que pasará para ti es el futuro, este es tu presente. Pero esto para mí esto es mi pasado… Soy un viajero del tiempo, I know, suena descabellado. Lo entiendo, pero esto es real y necesito que me ayudes; puedo mostrarte exactamente donde esta Anna y puedo explicártelo todo si me sigues; así que, ¿Qué dices?

Caminando por la acera en un día nublado.

-Entonces dices que viajas en el tiempo ¿Dónde está tu máquina del tiempo?

-No la necesito solo con casquear mis dedos regreso al punto exacto donde empecé. Frente a la puerta del restaurante mirándote a través de la ventana mientras vez tu teléfono con algo de prisa.

-Pero ¿por qué? ¿Por qué conmigo? ¿Cómo es que tú y yo estamos relacionados? ¿Eres un Terminador y yo soy el John Connor de esta época? O ¿Eres Barry Allen y Corriste Tan rápido que cambiaste el tiempo?

-Algo así, pero si es muy importante para ti, bueno para los dos. Viaje al pasado al momento en el que nos conocimos ¡hoy nuestra romántica historia comienza!

-Wow, wow, espera, espera, Hold on, men! No soy gay, para mi es muy claro que me gustan las mujeres.

-Bueno tal vez seas bi, no lo sé. La orientación sexual es un espectro. Todavía hay mucho por conocer sobre ese tema.

-Aun así, El morbo gay nunca se me ha dado. Incluso mi mejor amigo es gay y en todos estos años de amistad hemos pasado por muchas cosas y nunca ha existido esa clase de química entre nosotros… creo. Somos muy cercanos. Como hermanos.

-Así es, The amazing Charlie… lo sé, es buen tipo; En fin, mira el punto es que este es el día, hoy pasa, hoy nuestras vidas van a cambiar. Hoy se cruzan y se toman de la mano para no volverse a soltar. Y será algo que ambos necesitaremos.

– …Wow… intenso… ¿Eres poeta?

-Escritor de hecho; La cuestión aquí es que este día no será fácil para ninguno de los dos, hasta podríamos decir que este será peor día de nuestras vidas…

Kevin se queda estático frente al cruce en verde peatonal mientras Evan sigue caminando. Evan mira hacia atrás y extiende su mano para hacerlo avanzar. Kevin acelera el paso para divisar una notable figura femenina a través de una ventana de vidrios difuminados sentada dentro un restaurante parecido al anterior. Evan toma nuevamente de la mano de Kevin. En ese preciso momento el cuerpo de Kevin es sacudido por una inusual sensación.

“es como si la calma, la felicidad y la tranquilidad te sostuvieran. Sientes que nada puede derrumbarte porque estar con él te hace invencible”.

Con un ligero tirón Evan hacer girar a Kevin hasta que quedan de frente.

-Ella te engaña desde hace 2 mes…

Evan toma a Kevin por ambas manos hasta que sus palmas encajan perfectamente una a la otra.

-Sale con alguien que tu conoces desde hace mucho tiempo y se conocieron gracias a ti… ha estado hablando cada noche. Están… conectados. De verdad lo siento quisiera que esto no terminará así, pero… así pasará…

Kevin plasmado en los ojos de Evan comienza desencajar sus manos, retomando su mirada hacia aquella ventana de difusa proyección. Evan pasa su mano por el brazo de Kevin hasta llegar a su mano y entrelazar sus dedos.

-Tienes que seguir adelante. Kevin, le pedirías que te acompañe a esa importante cita que tienes hoy y sé que en estos momentos necesitaras del apoyo de alguien que te sostenga cuando tú ya no puedas. Pero por eso estoy aquí… te acompañaré a afrontar lo que más temes y tú me sostendrás de la mano cuando yo no pueda.

Kevin gira la mirada hacia los ojos de Evan y comienza a alejarse junto con él rumbo hacia lo que sería, la segunda peor noticia de su vida… y la primera en rango de gravedad.

Sentados las sillas de la sala de espera, Kevin apoya sus codos sobre sus rodillas, entrelaza sus dedos y apoya ligeramente su nariz en sus nudillos, alerta a la espera de su llamado en la clínica luego de haberse realizado varios exámenes y estudios, Evan corta el espacio que hay entre ellos y apoya su cabeza en el hombro de Kevin abrazando su brazo derecho.

– ¿Cuantas veces has vivido esto conmigo? – pregunta Kevin con la mirada perdida.

-Más de las que te imaginas…

– ¿Cuál es el motivo de tu viaje en el tiempo?

-Quería hacer que este día fuese menos doloroso para ti, mostrándote la mejor manera de poder manejarlo.

Kevin separa su rostro de sus nudillos y gira su cabeza hacia Evan. – ¿Y Por qué lo has vivido tantas veces?

-Yo esperaba ver ese instante en el que nos conocemos… pero luego ese momento no pasa. Un ligero movimiento en el espacio, un respiro, un nuevo aleatorio acontecimiento lo cambiaba todo. Siempre; pero estaba decidido a esperar y con la esperanza de ver cómo pasaba más a delante. Pero mi viaje tiene un límite de tiempo y cuando llega yo regresaba al punto de partida frente a la puerta del restaurante viéndote a través de la ventana, sentado y esperando. Y así comenzó mi travesía a través del tiempo viviendo incontables veces el momento previo a la vida de nuestra relación.

– ¿Ah qué hora pasa nuestro encuentro?

-Cuando el reloj marca las 6:05p.m regreso en el tiempo.

– ¿Y que estamos esperando? Son las 5:58pm Llévame a conocerte ahora mismo. ¡Quiero ver qué pasa!

– Eso ya lo intenté. Créeme, Ese fue mi primer viaje y solo te seguí a ver qué pasaba y cuando llegó la hora, regresé al punto de partida y no supe que hacer, desorientado que entré al restaurante y me senté en la mesa atrás de ti. Lo único que se me ocurrió fue contarte lo que pasaría a ver si podría lograr que nos conociéramos; pero en cuanto se me ocurrió la idea chasqueé los dedos y volví aparecer en el punto de partida, Así que descubrí que también puedo volver a empezar cuantas veces quiera solo chasqueando los dedos. Así que empecé mi travesía por el tiempo. En una no estoy en esa habitación y no me encuentras, así que chasqueé los dedos; en otra antes de que llegaras, llegan doctores y entonces no alcanzas ah hablarme, así que chasqueé los dedos; en otras no apareciste desde el momento del restaurante así que te busqué en los otros lugares donde estarías. Pero tampoco estabas ahí. No estuviste en ningún lado… Chasqueé los dedos, en otra cuando ya estabas aquí en la clínica, tomé el arma del vigilante y te apunté a la cabeza hasta llevarte hasta donde yo estaba… y para entonces yo había entrado en crisis y me llevan a cirugía.

-también estás enfermo… ¿es grave?

– Si, bueno Más o menos… en fin, también hubo terrenos, tsunamis, la ira de Dios, …extraterrestres, La tercera guerra mundial, zombis, meteoritos y muchas más cosas extrañas de las que te puedes imaginar, pero ese momento nunca llega. Ya sea porque el tiempo se me acaba o algún suceso interviene y lo cambia todo.

Evan se separa de Kevin y apoya sus manos en el asiento de la silla con la mirada al piso.

-Hubo una en la que entré al restaurante y te vi y tú ya estabas de pie mirando fijamente horrorizado, porque detrás mío había un hombre vestido de negro con un pasamontaña cubriendo su rostro. Apenas se le veían los ojos; dio un gran salto paso por encima de la barra hasta estar frente la caja registradora, apuntó con un arma a la cajera y ella empezó a sacar el dinero temblorosamente. Tú estabas tan alterado por lo que presenciabas que hiciste lo mismo y llegaste hasta el punto donde estaba la chica y la apartaste para protegerla y al tratar de tomar el arma, él te dispara… dos veces en el pecho, luego toma el dinero y sale corriendo… te alcancé a sostener cuando te desplomaste, pero en tus ojos ya no había luz. Así que chasqueé los dedos… después de eso tuve tanto pánico de que si entraba sentía que volvería a pasar y que por más que quisiera no podría salvarte. Así que me quede enfrente de la puerta, por muchas veces.

-cuantas?

-30…, 30 veces en las que solo veía pasar el día una y otra vez mirando como la puerta se habría y cerraba una otra vez mientras pensaba en cómo evitar verte morir nuevamente. Se que eso podría no volver a pasar, pero no podía dejar de imaginármelo.

-Y luego ¿qué te hizo volver a intentarlo?

Evan alza la mirada y centra sus ojos en una lejana ventana que dejaba ver arboles moverse al son de una leve brisa.

-En una de esas tantas veces en las que solo me aquedaba mirando la puerta, tú la cruzaste con gran impulso como si nada te detuviera, pasaste frente a mí y me miraste, y me guiñaste el ojo junto con una leve sonrisa de medio lado y luego seguiste el paso. Ese momento me recordó todo lo que habíamos vivido.

– ¿Todo? ¿Cómo es nuestra vida en el futuro?

– vivimos en Europa, a las a fuera de la ciudad, pero no muy apartados de ella, nos casamos, tenemos un perro al que adoptamos con el nombre de Charlie, un auto para ir a la ciudad y dos bicis para recorrer el pueblo, dos hijos el primero adoptado y el segundo por inseminación artificial, decidimos no saber genéticamente de quién es hijo a menos que sea realmente necesario, aunque se parece mucho a ti – Evan Sonríe mientras posa su mirada en el asombrado rostro de Kevin – ahora entiendes porque hago cuanto puedo por volver a tenerlo todo.

– Entonces el punto es que en cada viaje hay una variante de sucesos, y aunque al final del día, de alguna forma lleguemos donde se supone que debemos de llegar, el final cambia y lo que debería de suceder no sucede.

-Y te cuento esto para que estés preparado. Una vez más y vayas a donde tengas que ir, esperando tener un final feliz.

Kevin Suelta sus dedos y frota las palmas de las manos por encima de sus muslos para secarse el sudor. -No crees que ese final que tú quieres que pase, a la final no debería de pasar. Y por eso es que no sucede – Kevin Se acomoda para apoyar su espalda con el espaldar de la silla, cruzando sus brazos y estirando sus piernas.

-Y entonces qué sentido tendrá para el universo que me tenga viviendo el mismo día una y otra vez de tantas maneras posibles si al final no pasa nada… ya no sé qué hacer e irónicamente que esperar…

Evan pasa sus dedos por su cabello peinándolo hacia atrás, hasta juntados en su nuca e inclinando su cabeza para apoyarla en la pared, mientras a los lejos el nombre de Kevin Luna es anunciado por la doctora en señal de que es su turno para seguir.

-Déjame afrontar esto solo – pide Kevin – quiero ser fuerte esta vez – lentamente se levanta y se va alejando de Evan hasta llegar hasta la puerta del consultorio y cerrarla. De todas las veces en las que lo acompañe a recibir esa primera noticia solo una única vez entre con él y sus manos templaban mientras sus ojos se cristalizaban, escuchar su noticia, era como escuchar la mía por primera vez.

“Sientes no comprender que tu mundo cambia y no lo aceptas, el hecho que tu vida ahora dependerá de una noticia”

Kevin sale del consultorio corriendo antes de terminar de escuchar a la doctora, Evan va tras él y lo lleva un pasillo solitario lo apoya de espaldas hacia la pared, y se estrechan hasta que sus frentes y sus narices se tocan.

-No hay nada en este mundo, nada que no puedas afrontar, conmigo o sin mí, eso yo lo aprendí de ti… lo aprenderé de ti, es por eso que este es el mejor/peor día de nuestras vidas, porque como te dije antes. Te acompañaré a afrontar lo que más temes y tú me sostendrás cuando ya yo no pueda.

Kevin gira sus ojos hacia la derecha y comienza a acercase para tratar de darle forma a los que ya hace frente a él, seca las lágrimas de sus ojos y aceleradamente camina hasta acercarse ante un chico que trababa de levantarse torpemente del piso, apoyándose de un sillón, Kevin lo sostiene de su mano y lo toma rodeando su espalda impulsándolo delicadamente hacia arriba hasta ponerlo de pie y sentarlo en la silla.

-Hey, ¿estás Bien? Alguien debería de estar contigo en momentos como este.

– No te preocupes, soy más fuerte de lo que crees – El chico levanta lentamente su mirada – Estoy mucho mejor ahora – una pequeña sonrisa comienza a dibujarse en el rostro del chico, extiende su mano en dirección a Kevin y revela – Hola, soy Evan…

El momento que por tanto tiempo Evan había anhelado presenciar, por fin había llegado. Cerró los ojos e inclinó su cabeza hacia atrás y respiro profundo en señal de victoria, estiró su pie izquierdo hacia atrás y dando un emocionado giro y abrió sus ojos… dándose cuenta que sin saber cómo, nuevamente estaba en el punto de partida…

CAPITULO DOS: CONOCER EL FUTURO ALTERA EL PASADO.

– ¡No! – y hay estaba Evan, nuevamente de frente al interminable pasado persiguiéndolo sin cesar; con pasos muy lentos se adentró del restaurante acercándose a Kevin – Hola -suspiró – sé que dirás que no me conoces, pero…

– Eres Evan, vienes del futuro a hacer que el peor día de mi vida se convierta en el mejor día, porque hoy nos conoceremos, hoy nuestra historia comienza – con la cabeza inclinada hacia un lado y la boca abierta Evan queda en silencio tratando de asimilar la situación.

– ¿Cómo es que sabes quién soy?

-Ya vivimos este día en el que te apareces contándome que eres un viajero del tiempo, acercándote a mí y explicándome todo lo que va a pasar… y al final del día pasó, pero aun así seguimos aquí nuevamente, desde el punto de partida. Y sé que seguiremos viviendo esto una y otra vez a menos que cambiemos algo… así que necesito que me digas exactamente por qué estás aquí.

Evan baja las manos de la mesa y las coloca entre sus muslos, hecha su cuerpo hacia atrás y fija su mirada en Kevin – Esta bien, en la realidad es esta: – era cierto que Evan solo recordaba parecer frente al restaurante, sin detenerse a pensar por qué estaba ahí, encontró a Kevin dentro del restaurante mientras miraba su celular, se acercó a él, pero se asustó y decía que no lo conocía. Desde ese momento todo fue confuso para Evan y fue cuando notó que Kevin se veía unos 20 años más joven; Kevin desconcertado por un mensaje que había recibido, se retira mientras hacía una llamada. Evan los siguió hasta llegar al lugar donde estaba Anna, viéndola tomándose de la mano con otro sujeto, en cuanto Kevin los vio, entró eufórico al restaurante. Al verlo ellos se levantaron de la mesa y comenzaron a discutir con Kevin,

pero rápidamente el enojo se convirtió en culpa y Kevin dejó de hablar mientras el amante de Anna le gritaba. Kevin pone su atención en ella, pero al tratar de acercársele, el chico lo empuja y Kevin se golpea con la mesa que estaba detrás tuyo dejándolo caer al piso junto con una bandeja llena de varios vasos llenos de bebidas que estaban sobre la mesa. Él quedó en el piso en estado de shock mientras trababa de limpiarse. Mirando todo desde afuera, Evan apretó los puños tanto que se le encajaron las uñas en la piel, Entró al lugar de los hechos y sin soltar los puños empujó al agresor, pero él solo da dos pasos hacia atrás, Anna se puso entré los dos para alejarnos. – ¿Quién eres? Preguntó Anna, pero Evan no respondió, solo lo ayudó a levantarlo y se movilizaron a una tienda de ropa que estaba a dos locales de distancia. Lo ayudó a cambiar de ropa y curarle algunas heridas que se había hecho con los vidrios rotos para luego partir a la cita de Kevin. En parte del camino y en la sala de espera de la clínica, Evan le contó toda vida que tendrán por delante – Y eso es exactamente lo que recuerdo de ese primer viaje en el tiempo – Expresa Evan extendiendo sus brazos.

-Aún te falta contar la parte más importante de la historia – reclama Kevin inclinándose hacia adelante. Ambos quedan completamente en silencio mirándose a los ojos así que Evan continua – Te conté en donde yo estaría y fuiste a verme, pero a las 6:05pm te detuviste ante la puerta y me viste en el piso, luego de un lapso corto me levanté por mis propios medios y me senté en la silla, diste media vuelta y me dijiste “es así como esto debe ser” Y te vas, yo te cojo por el brazo con fuerza, pero regreso en el tiempo al punto de partida… Creó que ese es el nuevo destino, pero no me atrevo a aceptarlo.

Kevin suelta una pequeña carcajada- Entonces creo que yo soy el malo de la historia.

-Sólo sé que de todas las veces en las que viaje en el tiempo en dos ocasiones logras verme y en la primera dices no y en la segunda el universo me da un portazo en la nariz.

Kevin chasquea los dedos y de un gran impulso se pone de pie a un lado de la mesa – Pero ¿sabes qué? – su diafragma se infla de aire – Está vez será diferente, Enfrentaré a Anna, le diré todo lo que tengo para decirle, luego iré a la clínica, escucharé mi diagnóstico y esta vez no saldré corriendo, Luego iré a conocerte “accidentalmente” y nuestras vidas se cruzarán para no volverse a alejar. ¡Hoy! es una nueva oportunidad de este mismo día y la tomaré y la enfrentaré – Toman los dos la marcha a pasos sincronizados sin mirar atrás.

Mientras los dos van caminando apresuradamente hacía el nuevo destino que intentan crear, se aparece Anna sentada en la segunda mesa de aquel parecido restaurante, Kevin decide dejar a Evan atrás y enfrentar a Anna, tomo un positivo y muy controlado impulso, cruzo la puerta y se sentó en la silla frente a ella con los brazos cruzados; sin decir ni una sola palabra, Anna rompe el silencio – bebé, no te esperaba, ¿qué haces aquí?

-Te estás viendo con alguien más desde hace 6 meses y lo conozco porque lo sé, Evan ya me dijo.

– ¿Evan? ¿Quién es Evan? – pregunta Anna-

-Olvídalo, ¿Con quién sales? O mejor ¿por qué?

Una mesera se acerca a Anna entregándole un granizado, Anna se levanta torpemente y le da la espalda a la ventana y toma el granizado tratando de moverse ante el tensionante ambiente, Kevin se levanta de la mesa y se coloca frente a ella, mientras Anna trata de formar una oración entre balbuceo – creo que no estábamos destinados a estar juntos… – desconcertado Kevin voltea su mirada hacia la ventana divisando a Evan quien lo esperaba pacientemente afuera del restaurante muy atento a lo que ocurría mientras solicitaba un taxi por medio de una App – Creí que podría soportar esto, pero la verdad es que no puedo –expresa Kevin sin poder mirarla a los ojos; inesperadamente Kevin escucha ser nombrado por una voz muy familiar que lo hace voltear en cámara lenta – Kevin, amigo mío no te esperaba por aquí – Kevin rota su cabeza a unos 180 grados. Algo así como que su cuello giro por completo al punto donde se encontraba Anna; ella con su expresión de “trágame tierra”, mira a amigo de Kevin y Este regresa su cabeza a su posición normal – Aaron… – expresa Kevin el nombre del que fue siempre su mejor amigo de la infancia. sin pensarlo dos veces, Kevin apretó el puño lo más fuerte que pudo y le lanzo un gancho derecho directamente en el ojo izquierdo de Aaron tumbándolo al piso El solo se le queda mirando fijamente a Anna para luego darle la espalda y reincorporarse a Evan, cuando ella revela – No debimos habernos conocido – En ese preciso momento, la mente de Kevin comienza a aclararse mientras se acerca cada vez más a Evan hasta estar frente a frente, mete sus manos en los bolsillos del pantalón y con voz muy desalentada confiesa – Peleamos mucho, viviremos las etapas de nuestras enfermedades en momento diferentes en la vida de nuestra relación y eso nos frustrará mucho y discutiremos por no afrontarlo. ¿No es así?

-Tú eres un espíritu muy aventurero – le recuerda Evan a Kevin – y tu enfermedad te hará parar por un tiempo, pero gracias a la valencia de un motociclista que olvido usar casco, tuviste tu trasplante bastante rápido y mejoraste, nos conocimos en mi penúltima sección de quimio. – “Y te acompañé a afrontar lo que más temías y tú me sostuviste de la mano cuando yo no pude” – Y por mucho tiempo todo fue color de rosa familia, amigos, casa, salud y tranquilidad.

-Y volviste a Enfermar – expresa Kevin con voz quebrada – Tuviste metástasis y está vez fue más peligroso y requeriste de mucha atención las 24/7 y me desesperé porque me estaba limitando a dejar de hacer mis cosas solo algunos días, luego semanas hasta que no hacía otra cosa mas que cuidarte…

-Y eso te derrumbó Hasta que un día a las 6:05pm me dijiste: No debimos habernos conocido – expresan los dos al mismo tiempo. Quedando todo en silencio se acerca un vehículo confirmando el servicio para Kevin Luna – Tienes que irte a tu cita, Kevin… – sin soltar una sola palabra, Kevin sube al auto y Evan toma el camino contrario desapareciendo por completo.

En la sala de espera desahuciado y con los ojos cerrados, intenta comprender qué pasará cuando lleguen las 6:05pm mientas intenta borrar las lagrimas que le recorren por la mejilla. Un leve movimiento hace estremecer la unión de las sillas – Siento que todo esto lo creó tu subconsciente luego de aquella revelación tuya, pero se siente tan real que parece mentira – declara Evan que se había juntado al lado derecho de Kevin.

-No debimos habernos conocido… en serio no debimos, pero aun así pasó. Lo hicimos, todo el destino estaba preparado para que eso no ocurriera, pero pasó y fuimos muy felices y lo sabes… Cuando lamento haberlo dicho y realmente lo siento y no quise decirlo, enserio. no sólo lo sé. Lo viví y realmente me arrepiento mucho por eso – se levanta de la silla con gran emoción y manifiesta, pero ya todo estará arreglado porque entendí que, si debimos conocernos, es más, iré ahora mismo a donde tu versión de este tiempo está para conocerlo – da media vuelta y empieza a caminar.

-Ya es tarde, el daño ya este hecho y no puedes remediarlo. Desde un comienzo yo sentía qué era lo que debía hacer, pero no lo aceptaba, y por eso volvía en el tiempo, pero ya sé que es lo que tengo que hacer para que esto acabe.

– Evan, ¿qué piensas hacer?

– Evitar que me conozcas y así esto acabará – de un gran salto Kevin corre hacia Evan para evitar que se devuelva en el tiempo y lo toma por la mano, dirigiéndose rápidamente a la habitación donde estaría su versión joven, pero esté no está ahí. Kevin lo toma fuertemente por los antebrazos – ¿dónde estás? ¿Después de que sales de la habitación hacia donde te diriges? Por favor Evan, dime.

-Lo siento, te dije ya es tarde, no importa lo que hagamos.

Lo estremece con gran fuerza- ¡no! ¡Aún hay tiempo!

-Lo siento… Ya soy las 6:05pm – y para entonces Evan desaparece…

Continuará…