30 millas a casa
La noche estaba lluviosa, bastante, a decir verdad; eran más o menos las 1:00 am y ya llevaba alrededor de una hora conduciendo, estaba cansado y aun me faltaban otras 30 millas para llegar a mi destino; lo único que conseguía visualizar eran las luces de mi vehículo que iluminaban la carretera frente a mí...