El reflejo
Subo las escaleras con prisas, no miro los escalones, apenas los rozo. Cierro la puerta con fuerza y comenzamos a discutir. Ella me habla persuasiva casi rozando la obligación y yo, con mil dudas y titubeando intento no caer en su trampa. Sus argumentos quieren dejarme sin nada que decir. Su forma de hablarme es...