club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
2009participaciones
Viajes encadenados (concurso semanal de microrrelatos) 1ª fase: del 30 de enero al 5 de febrero (hasta las 08:00 h)
2ª fase: del 6 al 12 de febrero (hasta las 08:00 h)
3ª fase: del 13 al 19 de febrero (hasta las 08:00 h)
4ª fase: del 20 al 26 de febrero (hasta las 08:00 h)
5ª fase: del 27 de febrero al 4 de marzo (hasta las 08:00 h)
6ª fase: del 5 al 11 de marzo (hasta las 08:00 h)
7ª fase: del 12 al 18 de marzo (hasta las 08:00 h)
8ª fase: del 19 al 25 de marzo (hasta las 08:00 h)
En esta maleta no cabe casi nada.Cabe nada y todo al mismo tiempo.Cuánto hace que volvimos de Matemwe.De ser por ti, aquella blanca y suave arena habría sido nuestro único equipaje.Siento haber olvidado ese pequeño estuche de vidrio.Sé que lo hubieses atesorado hasta el final.¿Mantendrás nuestras huidas en tu memoria?Yo sí, María Francia.Por sobre todo,...
Se sintió perdida y mientras deambulaba, Amelia encontró la tarjeta postal en la acera de la estación de encomiendas, ajena a su destino y origen. Alguien se había equivocado y algún empleado negligente ni siquiera la había devuelto, ni tomado en cuenta a pesar de la hermosa estampa lunar de su portada. Amelia tenia noción...
En esta maleta no cabe casi nada- vociferó ella. Con una mano apretaba la parte superior y con la otra acomodaba las cosas que se iban saliendo de la misma, mientras con el pie hacía un intento de palanca. Fue entonces que vio salir una manito de plástico que parecía querer tocarle las piernas. Del...
¡En esta maleta no cabe casi nada! Mientras, mis tripas se retuercen, las mariposas quieren salir por mi pecho. Aunque, la vacié de nuevo y la vuelva a llenar, ellos siguen allí conmigo… ¿no sé qué pesa más? Pero, solo sé que ha llegado el día y estoy lista.
– ¡En esta maleta no cabe casi nada!--¿Y que mas quiera que quepa? Niña terca- Exclamo con brusquedad mi abuela, esta sentada con su café en mano y en la otra sostiene una pluma (juega sopa de letras,seguro).– Abue, es que aun me faltan muchas cosas, si no las llevo conmigo no se si pueda...
En esta maleta no cabe casi nada. Así que tendré que dejar casi todo, porque necesitaré espacio por si quiero traer algo de vuelta, algo nuevo, precioso, único: Ese algo especial que todos buscamos lejos porque nos parece imposible encontrarlo cerca. Llevaré mi blanca ilusión, mi pequeña esperanza, mi querida locura y un puñado de...
En esta maleta no cabe casi nada, parece de juguete, o de mentira, como si no fuera real. Dice la abuela que cuando conoció al abuelo aquel abril, en Francia, acabado de cruzar la frontera, le preguntó que tenía dentro de la maleta y él le contestó que llevaba su vida entera. La abuela la...
En esta maleta no cabe casi nada, y sin embargo me pesa más que cualquier otra que haya arrastrado, sin quererlo me he traído toda la carga de la que quería apartarme. Apenas estoy comenzando este viaje y estoy muy cansada. Recuerdo estar sentada en las escaleras cuando decidí partir. No me arrepiento, pero sé...
En esta maleta no cabe casi nada, así que solo meteré lo justo y mi ilusión, más mis ganas de disfrutar de la magia de lugares nuevos desconocidos, y dejaré hueco para traer a la vuelta mi bolita de recuerdo. Donde cada vez que las miro me traslado a esos lugares donde vivi experiencias y...
«En esta maleta no cabe casi nada», refunfuñó al intentar introducir todos sus neceseres. Estaba histérica, casi al borde del colapso, esa llamada la dejó tan perturbada que no sabía ni que sentir, ni que pensar, ni mucho menos que esperar. Se sentó en el piso, y acurrucada sobre la maldita valija comenzó a llorar;...
En esta maleta no cabe casi nada, refunfuñó mamá. Pepín agarraba con sus manos el caballito que le había regalado la tía Matilde. Yo con mis 5 años no entendía lo que pasaba, mantuve mis ojos muy abiertos para no perder ningún detalle. “¡Qué nos vamos a México, hija!” dijo mamá. Yo no sabía qué...
En esta maleta no cabe casi nada, pensó el andrajoso anciano al tratar de cerrar su antiguo baúl, única posesión que recibió de su padre. Dentro de aquella añosa ánfora de madera y metal, guardaba su roído libro de notas, su vieja cámara polaroid, algunas fotografías desteñidas y dos mudas de ropa. Aquello era todo...
