La pintora
Cuando conocí a Valentina vivía ensimismado, algo aturdido por la muerte de mi esposa, inseguro y asqueado de la vida. Las escasas salidas y la poca vida social que hacía, se habían convertido en las tinieblas de la antesala de mi propio funeral. Caminaba por las calles del pueblo al atardecer y sonámbulo respiraba el...