Syros
Cada domingo repito su ritual. En un absurdo intento por revivir, recurro a las postales. Ella decía que mirarlas era un modo de viajar. Las repaso una por una y siempre me detengo en Syros. Una postal melancólica, triste diría. Cuando la tengo en mis manos, nos recuerdo fantaseando con alguna taberna frente a un...