la muerte del viejo carmelo
Había un problemón, en el viejo salón de fuentes limón y yo siendo el mirón. Más de léxicos distribuidos a delinquir, se dejaba notar una afilada espada, como si hubiese allí grampada, en la zurda mano del señor robelo escala. En tan aterrorizada gente de cabello albo rizada frente, sin temblor de un timbal se...