EL ANDÉN QUE HABITÉ
Es el precio que se debe pagar por llevar una vida desordenada. Aunque estoy satisfecho por que siempre me perteneció. De joven ande sobre las nubes como si estuviese en otros mundos, acariciando las hojas de los árboles en el bosque nublado. No había un mañana. No estaba seguro de un presente, y el pasado...